¿Cómo protejo a mi familia?

4 motivos que me animaron a ahorrar para cumplir mis metas

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He soñado con tener un departamento propio desde que era joven, pero por diferentes motivos no pude comprarlo antes. Ahora, estoy convencida de que este es el momento ideal para empezar a ahorrar y cumplir ese deseo, pues fui ascendida en mi trabajo y hace unos meses nació mi hija Rosario. “Todo lo que quieres, lo puedes lograr”, me dijo alguna vez mi madre y nunca dudé de sus palabras. Me animé más cuando conocí el Seguro Vida Devolución de Pacífico, ya que iba a permitir que mis ahorros crezcan para hacer realidad mi sueño, y, a la vez, protegerá a mi engreída si algo me llega a pasar. Aquí explico más sobre estos y otros motivos que me alentaron a ahorrar con el seguro:

1. Ahorro para cumplir mi sueño. He visualizado el momento en que por fin tendré mi propia vivienda y la decoraré a mi gusto. Por eso, desde ahora, aportaré una cuota mensual de S/ 88 al Seguro Vida Devolución con el objetivo de que, en 15 años, cuente con un capital para la inicial del departamento que siempre quise.


2. Haré crecer mi dinero. Si no me llega pasar a nada durante el tiempo de protección que elegí en el Seguro Vida Devolución, Pacífico me devolverá hasta 150 % de lo que he pagado. De esta manera, el capital que iré ahorrando crecerá, lo que me permitirá contar con más dinero para llevar a cabo mi sueño. En otros casos, me informó la aseguradora, puede otorgar hasta el 200 % de lo pagado.


3. Protejo a mi hija. Desde que nació Rosario, he pensado en qué pasaría con ella si yo fallezco. Con el Seguro Vida Devolución me siento más tranquila, pues sé que mi pequeña recibirá una indemnización de S/ 100 000 para que mantenga su estilo de vida. Es decir, podrá cubrir su alimentación, educación, vacaciones, etc.


4. Elegí las características de la cobertura. Es muy flexible, por lo que tuve opciones para adaptar el seguro a lo que más me convenía. Por ejemplo, ofrece 6 plazos de contratación, desde 5,7, 10, 12, 15 hasta 20 años. Además, en la suma asegurada; es decir, el dinero que le otorgarían a mi hija si fallezco, tuve alternativas desde S/ 100 000 hasta S/ 150 000.

Sé que todavía falta tiempo para que llegue el momento de comprar un departamento, pero me siento muy ilusionada y ya me imagino disfrutando de cada ambiente con mi hija. De ahora en adelante, me corresponde ser muy disciplinada y cumplir con cada pago para que mi sueño no se frustre. Espero que cuando Rosario crezca valore este esfuerzo y se sienta orgullosa de mí. De esta manera, también le repetiré, como me decía mi madre, que puede cumplir todo lo que se proponga.